El gobernador electo de Río Negro, Alberto Weretilneck, adviertió sobre el deterioro de las rutas en el Alto Valle y la necesidad de inversiones para mejorar la infraestructura. A medida que crece la extracción de gas y petróleo en Vaca Muerta, el transporte de personas y cargas se vuelve cada vez más complicado en la región.
El futuro gobernador de la provincia de Río Negro, Alberto Weretilneck, ha planteado una preocupación urgente sobre la infraestructura vial en el Alto Valle, una región que experimenta un crecimiento constante debido a la expansión de Vaca Muerta. Las rutas congestionadas, en mal estado o con obras sin concluir se han convertido en un desafío diario para miles de residentes de la zona.
Según Weretilneck, alrededor de 5.000 rionegrinos trabajan en los yacimientos neuquinos de Vaca Muerta. Si bien esta actividad económica es vital para la región, el gobernador electo enfatizó que su crecimiento también ha tenido un alto costo en términos de infraestructura vial. «El 95% de lo que entra y sale de Vaca Muerta pasa por Río Negro. Todos los camiones y cargas pasan por la provincia, y eso es lo que estamos viendo en las rutas», explicó.
Hoy en día, viajar de Cipolletti a Cinco Saltos o Catriel por la Ruta 151, o de Allen, Roca o Regina por la Ruta 22, lleva el doble de tiempo que hace diez años debido a las condiciones de las rutas.
El líder de Juntos Somos Río Negro instó al gobierno nacional a considerar inversiones significativas para mejorar la movilidad interurbana en la región. «Este es un problema que, tarde o temprano, tendremos que abordar con el Estado Nacional, ya que al ritmo de crecimiento de Vaca Muerta y sus proyecciones, será muy complejo mantener nuestras rutas en su estado actual», declaró en LU19.
Por último hizo hincapié en la obra de ampliación de la Ruta 22, que ha estado incompleta durante más de dos décadas. Aunque critica esta situación, reconoce que también hay responsabilidades compartidas con los intendentes locales. «En Cipolletti nos opusimos al diseño de la ampliación desde el primer día, queríamos que se realizara por la barda norte. Sin embargo, la obra comenzó en la parte inferior y, posteriormente, intendentes como Martín Soria y María Emilia Soria la detuvieron legalmente en Roca. La ruta y el nuevo ferrocarril a Vaca Muerta deberían ir por la barda norte», afirmó.
